Y conste que quien busca… encuentra. No, no nos hace menos decir que queremos ir por la vida con alguien que nos tome de la mano. Y que nos diga que “todo va a estar bien”. Y que se encargue de que así sea (que no nada más sea verbo J) desde su trinchera; es decir, apoyando, inspirando, empujando para adelante.

Es que, a ver, querer a alguien (incluso a algo, aunque por supuesto no se compara en lo absoluto) no significa que estamos incompletas hasta encontrarlo. Querer es saber que se tiene mucho para dar y que estamos preparadas para recibir también.

Y ojo, eso aplica en la vida personal: amistosa, romántica, familiar, pero también en lo laboral y en lo social, en general.

Llamémosle a este concepto pareja, familia, amistad, equipo… ¡En conjunto se brilla más, como decimos aquí en Glow! Y eso nadie lo puede negar.

SE OFRECE HEROÍNA

¡Aquí está la magia! Porque no buscamos a alguien que nos salve. ¿De qué, ultimadamente? ¿De una misma? Pues esa es nuestra chamba, y comienza con una buena dosis de autoestima.

Confieso que yo agrego unas gotitas de mi fragancia favorita a mi día, y no es que por magia cambien las circunstancias, pero sí mi estado de ánimo.

A ver si fui clara: ¡La heroína, soy yo! Y tú. Y ella. Nosotras…. ¡Todas!

Eso, por mucho, es lo que nos convierte, como bien dice Carolina Herrera, en una Good Girl. Diría yo en una very Good Girl.

Mi querida Carolina así llamó a esta fragancia que me anima, y tuvo la audacia, además, de enfrascarla en un sofisticado zapato de tacón.

Peeeero, como decía yo al principio (y si lo avala la maestra del mundo de la moda y las fragancias, es que algo valioso hay ahí): Una heroína y un héroe lo pueden todo. Porque lo merecen todo.

SOMOS BUENOS PARA SER MALOS

Por supuesto que lo somos, y así tenemos que seguir. Hay que ser malos a la hora de seguir fórmulas, porque no van. Porque cada uno crea su propia existencia. Hay que ser malos a la hora de querer complacer a todos. ¿Para qué? ¿Por qué? Hay que ser malos a la hora de compararnos con otros. Eso es demasiado peligroso.

Así, como un trueno, cuando conocí la nueva fragancia masculina creada por la madrina y primera portada de la revista GLOW! (Diciembre 2004) Carolina Herrera de Baez, me quedó todo claro:

Una Good Girl es capaz de llegar a lo más alto y acompañada de un Bad Boy, su luz se potencializa. Ambos poseemos fuerza transformadora, y esa, es la que da más vida a la vida.